“Mal uso de internet en los adolescentes”
El Internet hoy en día en es una
herramienta muy importante para todas las personas, ya que nos facilita muchas
cosas en el ámbito laboral, social, etc. Lamentablemente se ha ido perdiendo
con el paso del tiempo la verdadera función de este, esto se da principalmente
en la etapa de nosotros: “la adolescencia”, donde se le da un mayor énfasis al
lado social, donde se puede entablar conversaciones con amigos, conocidos,
incluso con desconocidos. El mal uso del internet tiene diversos factores de
riesgo, estos son:
→ El acceso a contenidos no contrastados, poco fiables o falsos.
→ Una sobre estimulación, dispersión de la atención o dedicación de
excesivo tiempo para buscar una determinada información.
→ La facilidad de acceso a páginas con información peligrosa o nociva,
por ejemplo, a imágenes de contenido sexual, pornográfico o violento o a textos
y relatos que pueden incitar al consumo de drogas o medicación, así como al
seguimiento de ideologías de tipo racista, sexista o, incluso, a la afiliación
a determinadas sectas.
→ La recepción por correo electrónico de determinados mensajes de
propaganda no deseada, el contenido de la cual puede proponer negocios ilegales
o contener virus.
→ La participación en chats, foros o determinadas redes sociales puede
facilitar contactos indeseados con personas que pueden utilizar identidades
falsas, buscando, por ejemplo, víctimas para actos sexuales, violentos o
delictivos. Asimismo, la recepción de mensajes personales cuyo contenido puede
resultar ofensivo puede también propiciar la posibilidad de entrar en
discusiones, recibir amenazas o, incluso, encontrarse involucrado en
situaciones de abuso o acoso a través de la red. Hay que tener en cuenta que el
anonimato que proporciona internet puede facilitar el atrevimiento de determinados
comentarios o actitudes que difícilmente se expresarían en las relaciones
directas con otras personas.
→ La pérdida de intimidad que
conlleva la cumplimentación de formularios de acceso a algunas páginas,
facilitándose información personal a individuos o empresas desconocidas.
→ Los menores pueden verse
influenciados por una publicidad engañosa o abusiva, que les incite a realizar
compras por internet sin la autorización de sus padres. Los datos personales y
los códigos secretos de las tarjetas de crédito que se facilitan en las compras
pueden convertirles en víctimas de estafas o robos en páginas web poco fiables
o controladas por terceros.
→ El desarrollo de trastornos
psicológicos como la adicción a internet que pueden surgir cuando confluyen
determinados factores, como problemas en la autoestima, la sociabilidad o
dificultades familiares, unidos a la vulnerabilidad típica de esta edad y a la
cantidad de estímulos atractivos y sensaciones placenteras que puede
proporcionar internet.
La raja el post, muy bien redactado y el contenido es muy interesante. Un 10 de 10.
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